MANTONES DE MANILA

En el corazón de Zaragoza, La Parisién se ha consolidado como un referente en la venta de mantones de Manila desde su fundación en 1911. Con más de un siglo de historia, nuestra tienda no solo ofrece piezas únicas de artesanía, sino también un legado que conecta a generaciones. Cada mantón que exhibimos es un tributo al arte y la tradición, confeccionado con la meticulosidad que exige esta prenda icónica. En La Parisién, nos enorgullece preservar la esencia del mantón de Manila como símbolo de distinción y belleza. Ya sea para eventos especiales, espectáculos o simplemente para atesorar una obra de arte textil, nuestros mantones son seleccionados por su calidad y autenticidad. Breve historia del mantón de Manila El mantón de Manila, a pesar de su nombre, no tiene origen español, sino asiático. Fue introducido en España a través del comercio entre Filipinas, entonces colonia española, y Europa en el siglo XVI. Los mantones eran enviados desde Manila, adornados con intrincados bordados realizados a mano, que representaban flores, aves y otros motivos naturales. Inicialmente confeccionados en seda china, estos mantones rápidamente se integraron a la moda española, adaptándose a las costumbres y estilos locales. Durante el siglo XIX, el mantón se convirtió en un emblema de la elegancia femenina, especialmente entre las clases altas y las artistas flamencas. El mantón de Manila es mucho más que una prenda; es una expresión de la rica historia cultural y la fusión de tradiciones entre Oriente y Occidente. En España, su uso ha trascendido generaciones, y hoy en día sigue siendo un símbolo de identidad cultural y buen gusto. En La Parisién, honramos esta herencia, asegurándonos de que cada cliente lleve consigo una pieza que cuente su propia historia. Disponemos de mantones lisos para bordar en todos los colores, tamaños y con el fleco incluido. Consúltenos . DISPONIBILIDAD INMEDIATA. ESTAREMOS ENCANTADOS DE ATENDERLE EN EL 976 390 520 0 629 371 089 La Parisién es casa de los mantones de baturra en Zaragoza.